Los profesionales de las Artes Escénicas valencianas plantean 50 medidas para optimizar el sector

Los profesionales de las Artes Escénicas valencianas plantean 50 medidas para optimizar el sector

El documento, firmado por once asociaciones, recoge una serie de propuestas para preservar el futuro del colectivo de trabajadores escénicos

El Centre Octubre de Cultura Contemporània de Valencia ha acogido esta mañana la rueda de prensa de presentación de 50 propuestas para el futuro de las Artes Escénicas valencianas, un documento firmado por once asociaciones del sector que, atendiendo a sus necesidades reales y su pluralidad y diversidad, recoge una serie de proposiciones con las que abordar los cambios estructurales que requiere el contexto actual.

“Este texto nace de la responsabilidad reconocida por los profesionales y empresas de colaborar en la construcción de unas políticas culturales conectadas realmente con el sector”, ha comenzado señalando Carlos Amador, de la Asociación de Actores y Actrices Profesionales Valencianos (AAPV). “Las políticas culturales tienen la obligación de identificar, respetar y crear marcos reguladores concretos para las realidades de todos los profesionales y ámbitos del sector, trabajando por la inclusión y reconociendo la diversidad, dejando a un lado la competencia y el enfrentamiento”.

Por su parte, la representante de la Asociación de Profesionales del Circo de la Comunidad Valenciana (APCCV), María Colomer, ha destacado algunas líneas básicas del documento en lo referente al conocimiento del sector y el marco legal. “Es imprescindible que las administraciones públicas conozcan en profundidad la realidad y pluralidad del sector, incluyendo el patrimonio inmaterial, las empresas, los y las profesionales, y, por descontado, el público. Planteamos la realización de un censo exhaustivo de los profesionales, que reconozca la complejidad del tejido escénico e identifique sus características sociolaborales y económicas”. Colomer ha defendido, además, las reformas legislativas necesarias para elaborar y fortalecer la Ley Valenciana de la Cultura y la Ley de Mecenazgo Cultural, así como el desarrollo urgente de un Estatuto del Artista.

Mª Ángeles Fayos, en nombre de la Asociación de Empresas de Artes Escénicas AVETID, ha destacado algunas de las medidas referidas a las convocatorias de ayudas públicas, las cuales comprenden 21 de las 50 propuestas del escrito. “Solicitamos que en los textos legislativos de estas ayudas se diferencie entre industria cultural y sector creativo, y también que se incluyan criterios que vayan más allá de lo meramente económico. A la sanidad o la educación no les pedimos beneficios de este tipo”. A su vez, Fayos ha reivindicado la investigación como una línea estratégica básica de las políticas culturales, tanto como lo son la producción y la exhibición: “El modelo de ayudas no puede obligar a la producción anual de espectáculos, sino que ha de implantar y apoyar los proyectos a medio y largo plazo, tanto en salas de exhibición como de compañías o asociaciones profesionales”.

Las principales medidas en materia de innovación, circuitos y movilidad han sido expuestas por Ángela Verdugo, de la Asociación de Profesionales de la Danza de la Comunidad Valenciana (APDCV): “Pedimos la ayuda de las administraciones para la difusión y la promoción institucional de todas las artes escénicas valencianas, en forma de paraguas y mediante encuentros, festivales, muestras, jornadas y acontecimientos nacionales e internacionales”. El equilibrio de los diferentes lenguajes escénicos (circo, danza, artes vivas, teatro) dentro de las programaciones de los teatros públicos ha sido otro de los puntos a destacar, al igual que la creación de un plan de audiencias “que ponga el acento en la recuperación, motivación, búsqueda, creación y consolidación de públicos, además de fortalecer la presencia de las artes escénicas en el sistema educativo”.

Continuando con esta última cuestión, Jéssica Martínez, de Comitè Escèniques (Asociación de Creadoras y Creadores de Artes Escènicas Valencianas), ha hecho un llamamiento a “la colaboración entre espacios públicos, compañías y creadores, buscando una complicidad y un enriquecimiento entre programadores, artistas y público”. A su vez, ha destacado la importancia de impulsar nuevos circuitos de exhibición y de consolidar los ya existentes (como el Circuit Teatral Valencià o los programas en salas públicas y privadas), sin olvidar la reestructuración del sector alrededor de espacios de creación específicos y adaptados a los respectivos lenguajes escénicos, “que favorezcan un ecosistema variado, complejo y enriquecedor para creadores y ciudadanos”.

Por último, José María Bullón, representante de GC Gestión Cultural (Asociación Valenciana de Profesionales de la Cultura), ha explicado las medidas relacionadas con el Institut Valencià de Cultura, comenzando por un “diálogo real con el sector a la hora de desarrollar concursos públicos” y continuando por “una reestructuración del propio IVC, que aumente su flexibilidad y número de acciones, mejore los perfiles de sus profesionales y facilite el desarrollo de su misión mediante unas metodologías de trabajo, legislación y procesos de selección apropiados”. Además, se ha solicitado la realización de producciones y coproducciones públicas que puedan girar dentro y fuera de la comunidad, comprendiendo la diversidad de profesionales valencianos, y también una redefinición de las relaciones del IVC con el sector. Finalmente, Bullón ha vuelto a recordar que el documento “es un punto de partida para conseguir la fortaleza necesaria para las artes escénicas valencianas y garantizar el derecho de todos y todas a la cultura”.

Además de las seis asociaciones ya citadas, en la elaboración del escrito han participado también AVED (Asociación Valenciana de Empresas de Danza), FETI (Federación de Espacios Teatrales Independientes), ADVAEM (Asociación de Distribuidores Valencianos de Artes Escénicas y Música), AVEET (Asociación Valenciana de Escritoras y Escritores de Teatro) y PROTEA (Profesionales del Teatro de Alicante).

VT